En su sentido etimológico: María es la reunión de dos palabras hebreas, Mar que quiere decir Señora y Yam que significa océano. María: Señora de los Océanos.
María, Maryam, es, entonces, la Señora de los océanos, de las grandes aguas primitivas: Dios, en Ella, crea lo nuevo.
Por eso es que en el momento de la Anunciación el Ángel Gabriel la saluda bajo el nombre de Maryam, reconociendo en Ella a la Mujer de la Nueva Creación sobre quien planea el Espíritu, como planeaba el Espíritu sobre las aguas de la Primera Creación (Gen 2, Lc. 1, 26-38).
Antoine Mussali: Judaísmo,cristianismo e Islam,
Estudio comparad, ediciones de París, 2000
Bendiciones…
La Luz, el Amor, la Paz de Jesús y de la Bella María
están en ustedes
Thalia Ehrlich Garduño
Siempre confía en Jesús y en la Bella María 
Deja un comentario